jueves, 30 de mayo de 2013

Canadá. De Toronto a Montreal, 1ªParte

Se acercan las vacaciones de verano, y aunque el horno no está para bollos, los que puedan, estarán ya empezando a pensar en destinos. En agosto todo es muy caro, está muy lleno de gente, y hace mucho calor, pero es lo que hay. Muchos es el único mes que se pueden coger libre, y mirar destinos internacionales, en los que no te mueras de calor, no estés en época de lluvias, huracanes y demás regalos de la naturaleza, es complicado.

Canadá es un destino perfecto para verano. Es un "gran viaje" obviamente, no apto para todos los bolsillos, pero aquí hablamos de todo tipo de viajes, y este es una opción.
Yo estuve en agosto, y me pareció el mes ideal. Es un país facilísimo para ir por tu cuenta, en coche de alquiler, por ejemplo. Las distancias entre ciudades son largas, pero el paisaje es espectacular, por lo que no se hace largo para nada.

Es un país inmenso, por lo que dividiré Canadá Este en un par de post, para no liaros mucho.

TORONTO
Normalmente se llega aquí en avión desde Europa, y la sensación que te da, es de ciudad de E.E.U.U.
Es la urbe más importante, centro comercial y financiero del país. Hay muchísima riqueza cultural, gente que viene de todas partes. El idioma que más se habla es el inglés, pero casi toda la población habla también francés. 


Está situada a orillas del Lago Ontario, y tiene una calidad de vida estupenda. Igual por eso la gente es tan terriblemente amable y educada.

Cosas que ver y hacer
CN Tower: Es un clásico, no por la torre en sí, si no por las impresionantes vistas del Lago y la ciudad. No es barato, pero si el día es soleado, merece la pena.

Casa Loma: Un precioso castillo de finales del S.XIX, con unos enormes jardines, y un laberinto de pasadizos secretos que llevan hasta los antiguos establos.


Barrio St. Lawrence Market: súper auténtico, aquí se encuentra por ejemplo el Old City Hall, la Catedral de St. James, y por supuesto el Mercado con una variedad enorme de puestos gastronómicos.
Los fines de semana hay mucha vidilla, con puestos callejeros, y mucha gente por las calles.



Zona del Puerto: estuve en el parque del lago un buen rato, leyendo y comiendo sushi, y lo disfruté una barbaridad. Es un lugar muy agradable donde ver la puesta de sol, pasear, sentarte con un libro, o si tienes suerte, de un paseo en barco. Imaginaros qué paz, sentada en el banquito de la foto.


Distillery Historic District: Un distrito completamente diferente, las calles son peatonales, llenas de pequeños cafés y restaurantes, tiendecitas relacionadas con el mundo del arte y la cultura. Me encantó.


Si tenéis tiempo, también son recomendables un paseo en barco por el Lago Ontario,  una visita al Museo Royal Ontario y si vais con niños una excursión al Zoo de Toronto es muy buena opción.

Para compras: todo el mundo va al centro comercial por excelencia, EATON, donde están todas las grandes tiendas, pero también muchas que no se encuentran en España. Al cambio, el dolar canadiense nos sigue saliendo bastante bien, así que, si tenéis algún hueco libre y tenéis que comprar alguna cosa de tecnología por ejemplo, es una buena opción. La tienda APPLE, estaba a tope de extranjeros, locos por hacerse con el último modelo de IPHONE a bajo precio. 


Cataratas del Niagara
Es la excursión que hay que hacer. Turistada total, porque no puedes ir a tu aire, tienes que llegar allí, coger el famoso bote "Maid of the Mist", ponerte el chubasquero del color que te den... 
Pero no importa porque las cataratas son impresionantes, el salto de agua, el sonido... una maravilla de la naturaleza. La sensación del momento en el que te metes a fondo con el barquito, casi hasta dentro de la catarata, es algo que no olvidaré.



La ciudad que se ha ido creando alrededor, Niagara Falls, me parece un horror. Como muy artificial, todo súper turísitico, cadenas de restaurantes, ese tipo de cosas. Pero sí que es verdad que para comer, hay un poco de todo, comida de todo tipo.
Sin embargo, los alrededores son de una belleza extrema. Y muy cerquita está "Niagara on the Lake", que es una preciosidad de pueblo con arquitectura victoriana, y unas tiendecitas y paseos de cuento.
Es un buen sitio para merendar, para pasar la noche, y para hacer compras. Vas a encontrar cosas muy especiales, todo muy coqueto, artesano y chic.



Crucero de las Mil Islas
Dejando ya Toronto, de camino hacia Ottawa, paramos en Gananoque, un pueblecito desde donde se cogen los barcos para realizar el mini crucero por la región de las Mil Islas. El Lago Ontario, el mismo que está en Toronto, se convierte en río más adelante, en el río San Lorenzo, y por él, se realiza este crucero del que os hablo.
Hay muchos horarios y excursiones, os dejo la web aquí, yo cogería un crucero por lo menos de dos horas. O bueno, el que sea, pero aseguraros de que llegue hasta el Castillo de Boldt, que es espectacular.
No sé si en las fotos se apreciará bien, pero son un conjunto de mil islotes, algunos diminutos, con una sola casa o nada y otros más grandes, y el barquito te lleva por todos ellos, hasta llegar al Castillo, donde se puede parar a hacer una visita a pie, depende del recorrido que contrates.




 

OTTAWA

A unas cinco horas de Toronto, se ecuentras esta ciudad, capital actual del país que me sorprendió mucho para bien.
El centro histórico es precioso, con todos sus edificios de aire victoriano. Tiene mucha vida alrededor de los parques, paseos y por supuesto del río. Además tiene unas cuantas zonas muy, muy animadas, con un ambientazo tanto de día como de noche.
La gente es encantadora, y todo esto hace que sea una ciudad súper agradable y fácil de ver. Me hubiera quedado un par de días más de haber podido, eso seguro.
Yo recorrí la ciudad a pie, hay que andar, pero se llega muy fácil a todas partes. Si vas corta de tiempo, siempre se puede coger un autobús turístico, que es un poco rollo, pero ves muchas cosas en poco tiempo. También hay barquitos para hacer mini crucero por el río. 
Canadá tiene agua por todas partes, ¡¡es una gozada!!




La ciudad queda dividida en dos partes, por el Canal Rideau, que a su vez, en verano cuando fuí yo, era la típica vía de esparcimiento de la ciudad, con gente practicando deportes naúticos, paseando, andando en bici y mucho parque alrededor.



Lo que más me gusto de Ottawa:

Los edificios del Parlamento: muy british, no sólo por el estilo, si no porque se hace también el tradicional cambio de guardia como en Londres. Ya he visto unos cuantos, así que sólo paré un rato, pero hubo uno de los guardias más jovencitos, que se desmayó, y sacaron toda la parafernalia de la camilla etc... Siempre me pregunto si esas cosas están preparadas o no, pero son muy curiosas, y la gente se alarma mucho, es como una obra de teatro.



El Hotel Fairmont Chateau Laurier: Es una maravilla, por fuera, una de las estampas más típicas de la ciudad. Por dentro, por supuesto entramos a echar un vistazo y cotillear, y está fenomenal. Pregunté precios, y al cambio sale como unos 120€ la habitación doble. Que no me parece nada caro para la zona en la que está, el spa, el desayuno y las vistas que tiene. Aunque me han dicho, que el restaurante del hotel no es muy bueno, a unos amigos que cenaron allí, les decepcionó bastante.




National Gallery of Canada
El edificio no pega nada de nada con el entorno, es súper moderno, cristales, metal, ya sabéis. 
Pero dentro encuentras un montón de tesoros, desde representaciones de cómo era la vida canadiense en sus orígenes, los primeros colonos, y oficios, hasta obras más modernas de artistas autóctonos. 
Este año se celebra el 25 Aniversario de este museo, así que habrá exposiciones muy especiales. Os dejo la web por si queréis echarle un vistazo, (pinchando en el nombre).
Me hizo mucha ilusión encontrarme con una de las "hermanas" de la Araña del Museo Guggenheim.




Byward Market: El sitio ideal para hacer una paradita a medio día, hacer unas compras en el mercado y comer en uno de sus puestos o restaurantes. De hecho, me parece el mejor sitio para comer, ya sea picando cositas del mercado, o sentándote en un café. 
Además en el mercado puedes encontrar un montón de cosas para llevarte de regalo, como los típicos dulces de arce, en sus mil variantes.


Se le llama Little Italy, como la de Nueva York, pero con más encanto. Está repleta de tiendecitas, cafés, bares, restaurantes, heladerías, muchos de ellos italianos, de ahí el nombre. Yo estuve en agosto, y todos los puestos estaban en la calle, y podías encontrar absolutamente de todo.


Después de un día de visitas culturales, me pareció el sitio perfecto para tomar unas cervezas entre turistas y locales, escuchando música callejera en una terraza. Más que agradable.

No os quiero aburrir con muchos nombres de hoteles y restaurantes en cada pueblo o ciudad. Así que si alguien tiene pensado ir en algún momento, me escribís y os cuento tranquilamente, ¿vale?

LOOKS
Esta zona del país, es muy fácil de hacer, son casi todo pueblecitos o ciudades llanas, barquitos y demás, por lo que salvo que vayas a eso, no hace falta llevar calzado de trecking, con uno cómodo vale.
El tiempo en agosto, (por lo menos cuando estuve yo), es bastante caluroso, no para pasar muchísimo calor, pero viendo mis fotos, desde luego para tirantes o chanclas en alguna ocasión sí.

Os dejo algunos looks de MANGO, más o menos frescos e informales, poniendo una chaqueta aquí, un tacón o unas zapatillas allá, los podéis adaptar a la temperatura y al momento del día.



 


Y hasta aquí la primera parte de este viaje por la Zona Este. En el siguiente post vamos a un precioso y colorido pueblo de montaña, a Quebec y terminamos en Montreal.

Espero que os esté gustando la ruta de momento.
¡¡Hasta pronto!!










viernes, 24 de mayo de 2013

Viaje a la Edad Media

En la era de la tecnología, de los avances, de los smartphones, tablets y demás, parece que lo retro está de moda, que cualquier tiempo pasado fue mejor. Hay una vuelta a los pueblos, a la comida sana y natural, a las cosas sin artificio alguno.

En esta sintonía están los MERCADOS Y FERIAS MEDIEVALES


En ellos prima la artesanía, las cosas hechas con mimo, dedicación, arte y mucha paciencia.
Hay ferias y mercados más o menos grandes y currados por toda la geografía española. Aquí os dejo algunas páginas web donde podéis encontrar información de las más próximas a vuestra ciudad.

http://www.mercadosmedievales.info
http://www.mercadosmedievales.net/
http://actualidadmedieval.wordpress.com
Son webs que parecen un poco caóticas, por el tipo de diseño, por la cantidad de anuncios de ferias etc, pero que te dan información precisa de cuándo y dónde pasan estos artesanos por cada sitio.

He estado en muchas, sobre todo en mi provincia, Vizcaya. Mis preferidas están aquí, en Burgos, Cádiz, Calahorra, Madrid o Sigüenza. Pero seguro que hay un millón más, ya me contaréis.
De todas, la que más me ha gustado sin dudarlo es la de la localidad vizcaína de Balmaseda, que se celebró hace un par de semanas.

No os podéis imaginar, que pasada. Toda la ciudad engalanada, la gente disfrazada, cientos de puestos de todo tipo, animales, actores interpretando, artesanos trabajando, teatrillos callejeros...
Desde luego, súper, súper bien organizado y preparado.


 Los balcones del ayuntamiento, de las iglesias, de plazas y casas corrientes decoradas tan bonitas que te trasladan a otra época.








 ¿Qué me decís de los artesanos trabajando? me podría quedar horas mirándoles, sobre todo al que está moldeando el vidrio. Es algo que me gusta, y que me relaja muchísimo.
Y el panadero, haciendo primero la masa madre, luego el pan, cociéndose en ese horno. No sabéis que buenísimo está.









Si sois golos@s, va a ser vuestra perdición. Tienen todo tipo de tartas caseras, me encantan la de manzana, el brownie, tarta de Santiago, luego están los bizcochos, rosquillas, bollos... Todo sabe diferente. Una palmera de chocolate te puede durar para desayunar tres días, porque son muy, muy consistentes. Es increíble ver la diferencia de la bollería hecha artesanalmente, a la que nos encontramos por ahí, que tiene cosas químicas para dar y regalar.




 Todo tipo de embutidos, encurtidos, quesos, patés, mermeladas, golosinas naturales, salazones, miel directamente del panal. Las golosinas esas, son mi debilidad.





Para comer, tienes un montón de "puestos" con cosas asadas a la brasa, raciones, tapas, talo, diferentes vinos de cada localidad.
Y en la plaza, una gran Jaima, rodeada de puestos árabes, desde pinchos morunos, falafel o kebab, hasta sus típicos dulces y tés.



Encuentras cosas preciosas y originales para regalar. Utensilios y juguetes de madera, a los críos les encantan los escudos, los arcos y las flechas, puzzles e instrumentos de música.
También todo tipo de cosmética natural, complementos, cosas de decoración.



Los animales son los que más expectación crean, sobre todo entre los niños, que se quieren quedar horas ahí mirándoles, dándoles de comer etc...




Sobre como ir vestido aquí no hay duda, ¿no?. Trajes medievales aparte, zapato cómodo y ¡¡bolso grande!!




Vamos que si no habéis estado en una Feria así, os lo recomiendo para niños y mayores, (¡¡parezco un anuncio!!), vais a pasar un rato estupendo. Eso sí, preparad dinerito, porque todo lo bueno, ya sabemos que se paga, y aquí todo es extraordinario, pero bastante caro. Además súper, súper tentador, una vez allí es complicado controlarse y no llevarse medio mercado a casa.

Espero que os haya gustado, contadme si alguna feria así pasa por vuestra localidad.
Un besito y buen fin de semana
¡¡Hasta Pronto!!

jueves, 16 de mayo de 2013

De bodegas con amigas

Sábado 10 a.m, un coche lleno de amigas, y un destino, La Rioja.
Ir de bodegas es un planazo, ya os lo he comentado alguna vez en otros post, y esta vez me fui con unas cuantas amigas, y fue un día perfecto.
Decidimos empezar en Haro, capital de la denominada Rioja Alta, y que alberga muchas de las grandes bodegas de La Rioja.
Y allí, elegimos las bodegas del grupo RIOJA ALTA S.A.

No os voy a contar al detalle toda la explicación e historia de la bodega, porque sería eterno, y porque tenéis que ir, pero unos pequeños apuntes sí, ¿no?



El punto de encuentro es una especie de sala, súper moderna, que choca con el edificio antiguo de piedra, y que hace las veces de recepción, tienda y bar. Está decorado con muchísimo gusto, y en sus vitrinas puedes encontrar además de numerosas botellas de vino, aceites, espárragos, pimientos y otras conservas y delicatessen propias de la región.



Tuvimos una guía buenísima, súper profesional, que nos hizo la visita interesante y amena.

Empezamos por la sala de los toneles, donde nos explicaron qué madera utilizan, (roble americano), y cual es el proceso para curvar las maderas y crear los toneles, así como la conservación y duración de los mismos.


En la siguiente sala nos explicó como la bodega fue constituida en 1890 por cinco viticultores vascos y riojanos, con la idea de crear vinos de calidad. Y de ahí fueron creciendo y expandiéndose, dentro y fuera de nuestras fronteras hasta el día de hoy. Dentro de Rioja Alta se engloban dos "Gran Reserva", 890 y 904, dos "Reserva", Viña Arana y Viña Ardanza, (mi preferido), un "Crianza", Viña Alberdi y el Marqués de Haro.





La creación de la bodega, coincidió con la llegada de la luz a España, y todavía conservan esa primera bombilla, y la manera rudimentaria de encenderla.











Una de las cosas que más me gustó, fue la sala donde se encuentran las grandes tinas de madera, me parecieron preciosas. Mucho más que las antiguas de cemento, o las más nuevas de acero inoxidable.
Muy interesante el proceso de como las limpian "azufran", las capacidades que tienen etc...





Seguimos con la sala donde nos explican como se llenan las barricas, con un proceso manual, muy a la antigua usanza.
Justo al lado estaban grabando un programa para Radio Televisión española. No me extraña, el sitio es para grabar y ¡para quedarte una temporadita dentro!





Tiene varias plantas, y entre una sala y otra, zonas enormes llenas de barricas más o menos antiguas, larguísimos pasillos con millones de botellas de los diferentes vinos y un museo con botellas que son o han sido importantes por diversos motivos.
Casi todo está en semi penumbra, y con mucha humedad, para la correcta conservación del vino.



Lo de la temperatura del vino es muy importante. Si queréis comprar, hacedlo en bodegas o vinotecas, siempre va a ser mucho mejor que en un hipermercado, con esos focos de luz todo el día, y la temperatura tan cambiante.



Y por supuesto, terminamos con la cata. Fue original, nos iba haciendo preguntas, a qué os huele este vino, a que sabe... muy curioso lo que perciben los sentidos del olfato y el gusto, tan diferentes unos de otros.
Probamos primero el blanco, Lagar de Cervera, que nos gustó muchísimo, y luego Viña Arana y Viña Ardanza. Ahí tenemos opiniones encontradas, unas son más de Arana, que es más suave, y otras de Ardanza, que tiene más cuerpo.



Además de esta magnífica bodega, el mismo grupo tiene otras, que son: Torre de Oña, Aster y Lagar de Cervera.
Salimos cada una con un par de botellas, y alguna con un par de cajas para llevarse a Alemania...

De aquí nos dirijimos al precioso pueblo de Elciego, (a unos 20 minutos de Haro), donde se encuentra la Bodega Marqués de Riscal.
Además de la bodega y el vino en sí, se ha hecho súper conocido, (creo que ya os lo comenté en otro post), por el impresionante Hotel Marqués de Riscal, obra del arquitecto Frank Ghery. Todo hay que decirlo, recuerda mucho al Guggenheim, pero con diferentes formas y colores, y en teoría, se asemeja  a la vid, la planta donde crece la uva. El arte es ¡¡tan subjetivo!!



En el punto de encuentro, que también es tienda y bar, comimos unas riquísimas raciones, regadas con el vino de Riscal, antes de empezar la visita.



Aquí no os voy a hablar de la guía. Sólo decir que me reí mucho, y que, somos muuuuuy educadas y contenidas, porque ¡¡madre mía!!

El entorno es precioso, con los jardines, una especie de terraza antes de entrar a la bodega, decorada con muchísimo estilo, grandes salones, edificios de piedra antigua, como una mini ciudad del vino.
Desde luego, merece una excursión, el hotel y restaurante, son bastante caritos, al igual que el spa, pero la bodega en sí, y los diferentes bares, están muy bien y muy apañados de precio.


La primera parte de la bodega es súper moderna y no me gustó tanto como la anterior.


Aunque a medida que íbamos avanzando, "la bodega antigua"  sí que me pareció especial.
Es una bodega que se creó en 1858, y los primeros caldos de marqués de Riscal, se embotellan cuatro años despues. Desde entonces ha crecido muchísimo, tiene infinidad de premios, y está presente en 100 paises. Ahí es nada. Aunque afortunadamente, el 40% de la producción se sigue quedando en España.
La uva que se utiliza para estos vinos, crece en 1500 hectáreas en la localidad de Elciego y otras limítrofes.
Aquí os dejo algunas fotos de esta visita.








 La parte más antigua de toda la bodega, la Botellería, creo que fue lo que más nos gustó



 No me digáis que no es maravilloso que hayan conservado este lugar tal cual estaba. El detalle de la instalación eléctrica da miedito, ¿verdad?. Hay botellas de finales del siglo pasado, y en la "Botellería" te sientes como si hubieras retrocedido hasta entonces.  



Y por supuesto, terminamos con la cata. De blanco, un "Verdejo" espectacular, y de tinto un crianza Marqués de Riscal. Así que, después de varias catas, más los vinos de la comida, nos acordamos de que se nos había olvidado comprar el verdejo cuando estábamos de vuelta....



LOOKS
Una de looks reales esta vez, simplemente fotos de mis amigas para que os hagáis una idea. Un par de consejos, se anda bastante, se suben y bajan escaleras, así que, con o sin tacón, que el zapato sea cómodo. Aunque fuera haga calor, (no era el caso, porque el invierno no se va a ir nuncaaaa), dentro hay salas en las que hace bastante fresco, así que llevad siempre una chaqueta o jersey por si acaso. Ah, y agua, no sé por qué, pero todo el rato teníamos muchísima sed.








Espero que os haya gustado el post de hoy, y que os animéis a ir de bodegas.
Yo se lo quiero dedicar a mis amigas, las que estuvieron y las que no pudieron ir, porque dicen que quien tiene un buen amigo tiene un tesoro, y yo ¡¡¡soy súper afortunada de tener tantos!!!
 
Un besito y ¡¡Hasta Pronto!!